Era una asignatura pendiente: Tener unos aviarios de vuelo amplios y donde a las ninfas jóvenes les diera el sol, la lluvia y el viento.
Hemos construido unos aviarios de más de 6 metros de longitud por 2 metros de ancho y 2,3 metros de alto, con más del 50% del techo descubierto.
En ellos vamos a alojar a las ninfas recién separadas de sus padres. Dando la oportunidad a estas aves jóvenes de volar ampliamente, su desarrollo se completa mucho más rápido, consiguiendo mejor musculatura, y por ende mejor forma general.
Así mismo el hecho de estar en aviarios amplios y con gran parte del techo descubierta, hace que su plumaje no se estropee, y que con el sol, la lluvia y el viento cojan todo su esplendor.
Está demostrado que un alto porcentaje de las cualidades de un pájaro le vienen dadas por su genética. Pero el resto está directamente influenciado por su manejo, condiciones de alojamiento, alimentación, etc.
Seguimos trabajando en todo momento para poder ofrecer ninfas de la mayor calidad posible.