Guacamayo Jacinto (Anodorhynchus hyacinthinus)

Hemos Incubado, ayudado a nacer y criado a mano un Guacamayo Jacinto.

Pues sí, hemos podido disfrutar de esta bonita experiencia.
No muy lejos de donde vivimos, hay un señor que en el jardín mantiene varias parejas de guacamayos, en unos amplios aviarios. Entre dichas parejas hay una de Jacintos. El año pasado realizaron su primera puesta, pero con malos resultados, pues rompieron los huevos al poco de haberlos puesto. Este año volvieron a poner huevos. En una primera puesta solo pudieron salvar un huevo, pues el otro ya lo habían roto. El huevo era fértil, pero no llego a nacer. Al cabo de poco tiempo repitieron puesta, y esta vez pudieron salvar los dos huevos antes de que los rompieran.

La persona que gestiona la colección nos trajo los dos huevos a casa, y los pusimos en la incubadora. A los pocos días pudimos ver que los dos huevos eran fértiles, aunque uno murió antes de nacer (luego vimos que el huevo tenía una pequeña fisura, si nos hubiéramos percatado de ello habríamos intentado repararlo). El otro pollo empezó a picar sin problemas, pero por el lado opuesto a la cámara de aire del huevo, lo cual nos hizo estar muy vigilantes por si teníamos que intervenir. Y así fue, pues tras avanzar un poco en la rotura del huevo, dejo de progresar, y además la fisura que el pollo había hecho se tiño de rojo. Así pues y siguiendo lo aprendido en algún congreso que hemos asistido, nos decidimos a ayudar al polluelo a nacer. Cada dos horas, con Mireia mi mujer, controlábamos el huevo, y avanzábamos un poquito en su apertura. Hasta que al día siguiente acabo de salir el pollito de Jacinto. Por supuesto era el primer pollo de Jacinto recién nacido que veíamos, y realmente lo encontramos precioso.

Ahí empezó la ardua faena de criarlo a mano. Pues los primeros días lo alimentábamos cada 2-3 horas, día y noche. Realmente estamos muy felices con la experiencia, pues en todo momento el pollo se ha desarrollado perfectamente sin ningún problema. Y hemos podido gozar de ver como crecía día a día de forma desmesurada, además cuando empiezan a aparecer los cañones, y esas plumas azules maravillosas es una gozada. Además hay que destacar su carácter, súper cariñoso.

Hoy, con 3 meses y medio lo hemos llevado a casa del propietario de la pareja. En principio se lo queda como mascota, y lo ha alojado en una amplia jaula en el comedor. Aún les quedan unos meses de seguir dándole papilla, pero esta ya comiendo bastante por sí solo. Supongo que en esto ha ayudado bastante que desde el primer día y para que no estuviera solo, le pusimos a su lado un eclectus. Evidentemente el eclectus se ha desarrollado mucho más rápido, y esto ha hecho que de muy pequeño el Jacinto haya empezado a interesarse también por la comida sólida que poníamos para el eclectus.